jueves, 19 de agosto de 2010

Una forma de pensar.

Como toda nena normal, creci viendo & jugando a la tipica & tradicional historia, la chica o común o la princesa que se enamora del principe & a pesar de unas tontas como fantasticas complicaciones, ya sea un dragón, una bruja, o esa nena que me caía muy mal del jardín o la primaria, siermpre terminaba con el señor/principe o lo que fuere, siempre un final feliz.
Yo no hago a Disney responsable  de que ahora lo quiera, ni que de más chica haya soñadao & jugado a tenerlo. La culpa la tiene uno. Quien alguna vez vio a un nene jugar a que era un "perfecto idiota" al que le iba mal en absolutamentente todo, que la persona que quería con quien odiaba & demás posbiles desastres no catastroficos.  Yo creo que nadie.
Pero a medida  que los años pasan, pareciera que la vida nos arranca las alas en pleno vuelvo, & chocamos contra el frio e inmutable suelo de la realidad. O tal vez de la desilucion. También vemos con lo que pasa el tiempo & más creo que en los ultimos dos, tres años he visto, que ninguna historia de amor, se parece a otra. De hecho es imposible que haya dos iguales, tal vez parecidas.. pero no tanto a  fin de cuentas.
Hay quienes aman con lo más profundo de su ser & dan su vida por alguien, hay quienes no sienten nada,  hay amores masoquistas, sado-masoquistas, que son fuertes & etenernos en un sufrimiento tan personal, que desde afuera a veces pareciera que por eso se aman. Hay amores,  que terminan siendo obseciones, otros que aman con el sufrir, no es lo mismo qeu el masoquista, no.
Todos en si, & desde un punto completa & absolutametne personal son inigualables, consistentes, deslumbrantes, que puenden llenarte de felicidad... pero existe el amor egoista, la obsecion egoista.
Cuando realmente queres a alguien su felicidad es por lo que vos darias la vida. Cuando es egoista, es con vos de la unica forma de la que peude ser feliz. Si, no digo que sea sencillo asumir que quiera a otra persona, pero con lo que pasan los días & cuando ves al otro feliz, saltas de felicidada, solo por el otro.
Egoista, encierra, sufre & hace sufirr. El masoquista ama su surfiemiento, lo eleva e irradia lo que ama hacia otra persona. El sado-masoquista, no sabe expresarse de otra  forma, & aún así haciendote sentir  dolor, podría hacerte la  persona más feliz del mundo.
No, no todas las personas somos iguales, no todos amamos de la misma forma. Pero, como somos seres incomprensibles, & soprendentes, logramos que nuestras emociones, sensacions & sentimientos sean igual que nuestra existencia.  Incomprencibles, sorprendentes, cada uno a su forma.

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